Qué bonito es ver crecer una familia y qué ilusión ser su fotógrafa. Casi salto de la cama cámara en mano para regalarles un cofre lleno de imágenes.
Qué bonito es ver crecer una familia y qué ilusión ser su fotógrafa. Casi salto de la cama cámara en mano para regalarles un cofre lleno de imágenes.
Retratar las rutinas de las familias, las realidades más bonitas suelen esconderse bajo sábanas mientras afuera llueve o graniza.